Biólogo
y psicólogo sueco Jean Piaget estudió
los mecanismos básicos del desarrollo cognitivo llegando a plantear la llamada
Teoría Genética, la cual, a partir de los principios constructivistas plantea
que el conocimiento no se adquiere solamente por interiorización del entorno
social, sino que predomina la construcción realizada por parte del sujeto.
Piaget
creía que los niños creaban su conocimiento cuando sus predisposiciones
biológicas interactúan con su experiencia, siendo la construcción entonces, un
mecanismo de interacción entre la herencia y la experiencia que produce
conocimiento. Esta teoría y principios son los que subyacen su famosa y
rememorada Teoría del Desarrollo Cognitivo (Evans, 1987).
Sus
ideas sobre la teoría de desarrollo intelectual generaron una revolución en la
educación. Fue una teoría psicológica con un fuerte impacto en la práctica
educativa, generando la modificación y revisión del currículum en muchos
sistemas educativos
MECANISMOS BÁSICOS DEL DESARROLLO COGNITIVO
Adaptación e Inteligencia Según Piaget,
la inteligencia consistiría en la capacidad de mantener una constante
adaptación de los esquemas del sujeto al mundo en que se desenvuelve. Él
entiende los esquemas como aquellas unidades fundamentales de la cognición
humana, que consisten en representaciones del mundo que rodea al sujeto,
construidos por éste (Arancibia, 1999).
El esquema
Es
una unidad indivisible entre el sujeto y el objeto. Esta visión de la
inteligencia como adaptabilidad no alude, al contrario de como suele entenderse
la inteligencia, a un conocimiento específico o general. Por el contrario, se
trata de una capacidad común a los seres humanos de mantener una concordancia
entre el mundo y los esquemas cognitivos del sujeto, lo cual le permitirá al
sujeto funcionar en él. La adaptación, a su vez, es el proceso que explica el
desarrollo y aprendizaje. Ésta se produce por medio de dos procesos
complementarios: asimilación y acomodación.
Asimilación
Este
proceso consiste en incorporar nueva información en un esquema preexistente,
adecuado para integrarla (comprenderla). Esto significa que, cuando un sujeto
se enfrenta con una situación nueva, él tratará de manejarla de acuerdo a los
esquemas que ya posee y que parezcan apropiados para esa situación. Como
resultado de esto, el esquema no sufre un cambio sustancial en su naturaleza,
sino que se amplía para aplicarse a nuevas situaciones.
ACOMODACIÓN
Al
contrario de la asimilación, la acomodación produce cambios esenciales en el
esquema. Este proceso ocurre cuando un esquema se modifica para poder
incorporar información nueva, que sería incomprensible con los esquemas
anteriores. La acomodación de su cognición a la situación ha generado un nuevo
esquema. Estos dos procesos permiten que los esquemas del sujeto se encuentren
siempre adaptados al ambiente, y permiten el continuo crecimiento.
Cuando
el sujeto aprende, lo hace modificando activamente sus esquemas, a través de
las experiencias, o bien transfiriendo esquemas ya existentes a situaciones
nuevas, por lo cual la naturaleza del aprendizaje va a depender de lo que el
sujeto ya posee. En este sentido, podemos decir que el aprendizaje es lo que
las personas hacen de los estímulos y no lo que éstos hacen con ellas.
EQUILIBRACIÓN
Otro
punto interesante de los planteamientos de Piaget con respecto al desarrollo y
al aprendizaje concierne al mecanismo que impulsa a éstos. El impulso para el
crecimiento y el aprendizaje no proviene, según Piaget, enteramente del medio
ambiente, como ocurre en el conductismo. Por el contrario, este impulso está
dado por la equilibrarían, una
tendencia innata de los individuos a modificar sus esquemas de forma que les
permitan dar coherencia a su mundo percibido. Por ello, este autor plantea que
el aprendizaje, en tanto permite lograr esta coherencia, es su propia
recompensa. Al modificar una creencia que no le hace sentido, un niño se siente
recompensado por el hecho de satisfacer el principio de equilibrarían, y no
debería requerir de otros reforzadores (Cuevas, 2002).
El
aprendizaje no es una manifestación espontánea de formas aisladas, sino que es
una actividad indivisible conformada por los procesos de asimilación y
acomodación, el equilibrio resultante le permite a la persona adaptarse
activamente a la realidad, lo cual constituye el fin último del aprendizaje.
La
teoría del desarrollo cognitivo o modelo de estadios del desarrollo intelectual
de Piaget es, probablemente, la fuente de mayor influencia en el estudio sobre
el desarrollo cognitivo del niño. Este modelo fue publicado por primera vez en
1947 en su libro La Psicología de la Inteligencia, donde plantea la existencia
de cuatro etapas cualitativamente distintas del desarrollo cognitivo.
Las
cuatro etapas corresponden a una etapa sensorio motriz (0 a 2 años), etapa
preoperacional (2 a 7 años), etapa operacional concreta (7 a 12 años) y una
etapa llamada de las operaciones formales (12 años en adelante).
Cada
etapa está marcada por la posesión de estructuras lógicas de diferente y
creciente complejidad, en que cada una de ellas, permite la adquisición de
habilidades para hacer ciertas cosas y no otras, y para tratar de diferentes
formas con la experiencia.
El
paso por las etapas estaría definido por los intercambios sujeto-objeto, en la
medida que cada vez devienen más complejos y elaborados
1. ETAPA SENSORIOMOTRIZ:
Durante
esta etapa, la adquisición de esquemas se centra fundamentalmente en el área
sensoriomotora, lo cual se caracteriza por que el lactante aprende y coordina
una gran variedad de destrezas conductuales. El objetivo central de este
período es adquirir la capacidad de internalizar el pensamiento. Como esta
capacidad no se tiene desde el nacimiento, durante este período la inteligencia
es necesariamente externa y conductual (Brainerd, 2003).
2. ETAPA PREOPERACIONAL:
El
inicio de esta etapa está marcado por la presencia de función simbólica
(representación). Esta capacidad se puede apreciar a través del juego
simbólico, la imitación diferida y el lenguaje, que hacen su aparición en esta
etapa. Piaget califica el pensamiento preoperacional como intuitivo: ya que el
niño se centra más en los estados finales que en las transformaciones que los
producen, no es capaz de volver al punto de partida de una operación,
compensando las acciones realizadas con otras a la inversa.
Se
basa entonces, para predecir los resultados de las acciones, en experiencias
previas con los estados finales de esas acciones, y no en un conocimiento de
las transformaciones que median entre dichos estados. El objetivo central del
desarrollo de la inteligencia durante este período es hacer la inteligencia
menos egocéntrica y más socializada (Brainerd, 2003).
3. ETAPA DE LAS OPERACIONES CONCRETAS:
Se
caracteriza por la habilidad para tratar efectivamente con conceptos y
operaciones. El niño puede compensar las transformaciones con otras a la
inversa, es decir, su pensamiento se torna reversible, pues puede representarse
las transformaciones y no solamente los estados finales de las cosas. Sin
embargo, las operaciones que domina son concretas, no abstractas. Por ello
durante esta etapa, la habilidad para generalizar el aprendizaje es limitada,
pues lo que se aprende en un contexto no es transferido fácilmente a otro
contexto.
El
objetivo central de este período es guiar la inteligencia con las leyes de la
lógica y las matemáticas, una inteligencia operacional. En este período los
niños adquieren las habilidades de razonamiento como la propiedad de conservación,
la transitividad y la inclusión de clases (Brainerd, 2003).
4. ETAPA DE LAS OPERACIONES FORMALES:
Consiste
en el dominio de conceptos y operaciones abstractas. En esta etapa es posible
aplicar el razonamiento y las habilidades para la resolución de problemas en
contextos diferentes a aquellos en los cuales fueron adquiridos. El objetivo
cognitivo es extender el razonamiento lógico y matemático adquirido en el
estadio anterior, hacia un novel simbólico más abstracto con la ayuda del
lenguaje. El razonamiento ha de convertirse reflexivo y analítico.
Algunas
revisiones experimentales a la teoría de Piaget: Según Brainerd (2003), luego
de revisar los principios y estadios planteados por Piaget, el desarrollo se
puede resumir en 5 principios:
1.
El aprendizaje de los niños está limitado por las restricciones de cada etapa.
2.
La existencia de restricciones en cada etapa significa que los niños pueden
aprender conceptos relacionados con la edad, y este aprendizaje variará
significativamente en función del nivel cognitivo inicial del niño.
3.
La esencia del aprendizaje implica enseñar a los niños a aplicar nuevos
contenidos a las estructuras que ellos ya han desarrollado.
4.
Los niños no pueden aprender a la fuerza a aplicar estructuras cognitivas que
aún no tienen. La arquitectura cognitiva primero debe evolucionar por su
cuenta.
5.
De estos principios se sigue que, intentar enseñar a los niños conceptos que
están más allá de su estadio de desarrollo cognitivo, es una pérdida de tiempo
y esfuerzo tanto para el profesor como para el alumno.
BIBLIOGRAFÍAS.
Arancibia,
V (1999) Psicología de la
Educación, 2da edición, Alfaomega, México.
Cuevas,
W (2002) Teorías Psicológicas, Grafica Norte, Perú.
Evans,
R. (1987). Los artífices de la psicología y el psicoanálisis, conversaciones
con grandes psicólogos contemporáneos. México: Fondo de Cultura Económica
Brainerd, C. (2003). Jean Piaget, learning research,
and American education, Erlbaum, E.U.
No hay comentarios:
Publicar un comentario